El asesor de activos digitales de la Casa Blanca, Bo Hines, renuncia y regresa al sector privado
Bo Hines, director ejecutivo del Consejo de Criptomonedas de la Casa Blanca del presidente Donald Trump, ha anunciado su partida para regresar al sector privado.
Conclusiones clave:
- Bo Hines deja el cargo de director ejecutivo del Consejo de Criptomonedas de la Casa Blanca.
- Durante su mandato, el consejo avanzó en la política de criptomonedas de EE. UU., pero no cumplió con sus planes estratégicos de reserva de Bitcoin.
- Hines propuso revalorizar las tenencias de oro de EE. UU. para financiar las compras de Bitcoin sin aumentar el gasto público.
Hines, nombrado en diciembre de 2024, confirmó la medida el sábado, expresando su gratitud a la comunidad criptográfica y acreditando su colaboración con el zar de la IA y las criptomonedas, David Sacks, por ayudar a "posicionar a Estados Unidos como la capital mundial de las criptomonedas".
Aún no se ha nombrado oficialmente un sucesor, aunque la reportera independiente Eleanor Terrett sugirió que el subdirector Patrick Witt es el principal candidato.
El consejo liderado por Hines dio forma a la política criptográfica de EE. UU. con el plan regulatorio de julio
Bajo el mandato de Hines, el consejo desempeñó un papel clave en la configuración de la política criptográfica de EE. UU., incluido un informe de julio que describe un plan de acción regulatoria para los activos digitales.
Sin embargo, el grupo enfrentó críticas por no cumplir con su iniciativa estratégica de reserva de Bitcoin.
En enero, el presidente Trump firmó una orden ejecutiva que establece tanto una reserva nacional de criptomonedas como una reserva estratégica de Bitcoin.
La orden impide que el gobierno venda sus tenencias de BTC y requiere métodos "neutrales desde el punto de vista presupuestario" para adquirir más, lo que significa que no hay gasto público adicional.
Los nuevos BTC solo se pueden obtener a través de incautaciones de activos u otras vías no presupuestarias.
Hines propuso uno de esos métodos en marzo, sugiriendo que Estados Unidos revalorizara sus tenencias de oro, actualmente en los libros del gobierno, a 42,22 dólares por onza troy, más cerca del precio del mercado al contado de alrededor de 3.400 dólares.
Argumentó que una parte de las ganancias de revalorización podría convertirse en Bitcoin, expandiendo la reserva sin aumentar el gasto público.
"Al regresar al sector privado, espero continuar mi apoyo al ecosistema criptográfico a medida que prospera aquí en los Estados Unidos", escribió Hines.
Servir en la administración del presidente Trump y trabajar junto a nuestro brillante AI & Crypto Czar @DavidSacks como Director Ejecutivo del Consejo de Criptomonedas de la Casa Blanca ha sido el honor de mi vida. Juntos, hemos posicionado a Estados Unidos como la capital mundial de las criptomonedas. Estoy...
— Bo Hines (@BoHines) 9 de agosto de 2025
La administración Trump avanzó en su agenda pro-cripto esta semana con una serie de medidas políticas y regulatorias.
El presidente Trump firmó una orden ejecutiva instando a los reguladores a eliminar las barreras que impiden que los planes 401 (k) incluyan activos alternativos como las criptomonedas.
Si se implementan, las reformas podrían permitir a millones de estadounidenses asignar fondos de jubilación a Bitcoin y otros activos digitales a través de canales regulados.
Trump también nominó al economista Stephen Miran, un defensor de los activos digitales, para la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal, lo que indica la continuidad de la postura pro-cripto de su administración.
El anuncio coincidió con la subida de Bitcoin por encima de los USD 117,000, destacando el vínculo entre la evolución de la política y el sentimiento del mercado.
En una orden ejecutiva separada, Trump se movió para poner fin a las prácticas de "desbancarización" que apuntan a las empresas legales de criptomonedas.
La Asociación Blockchain elogió las medidas como un "cambio histórico" que ampliaría las opciones del consumidor, potenciaría la creación de riqueza y reduciría las barreras operativas para las empresas de blockchain.
La SEC se sumó al impulso positivo al aclarar que ciertos modelos de staking líquido, como los que involucran tokens de recibo como stETH, no son valores.
El presidente de la SEC, Paul Atkins, reforzó su compromiso de mantener la innovación criptográfica en los EE. UU., prometiendo un enfoque proactivo de la regulación y un alejamiento de la formulación de políticas basada en la aplicación.